
¿Hay artesanía en el siglo XXI? Por ahora sí, aunque cada vez es más difícil de encontrar ya que, poco a poco, está desapareciendo.
En un mundo industrializado que se rige por la super explotación de recursos, el abaratamiento de tiempos y costes de producción, estamos dejando de lado el valor de lo artesanal, el maravilloso legado centenario que posee una alpargata elaborada por un zapatero, un mueble único labrado por un avezado carpintero o una yema de un convento elaborada las prisas del mundo de fuera.
ARTESANAL, una palabra de la que se han apropiado engañosamente muchas empresas y negocios para darle valor añadido a sus productos cuando realmente lo que hacen con este maravilloso concepto es degradarlo y hacerlo desaparecer, ya que a cualquier cosa se le llama “artesanal”, desde un pan de molde hasta unas patatas fritas de bolsa, pasando por un café. La publicidad y los medios colaboran desvirtuando esta cualidad única, inculcando la idea de que lo artesanal ya lo hace cualquiera, restando mérito a la mano experta.
El ser humano aprendió a hacer cosas con sus manos antes incluso que a hablar. Hemos transmitido durante cientos de generaciones nuestra cultura a través de estos productos o herramientas que hacíamos manualmente y, aunque la industrialización ha mejorado nuestras vidas agilizando y mejorando procesos, su desembarco salvaje al servicio de la prisa y el consumo instantáneo ha hecho que, en ciertos casos, que se pierda la esencia y el valor de los productos creados por nosotros mismos, gracias a un conocimiento milenario que está en peligro de extinción si no luchamos por este legado.
Por desgracia, el “conocimiento manual” no se puede guardar en libros, se debe transmitir de maestro a alumno, y ya casi no hay alumnos, ni siquiera maestros… Por ello, quizás debemos como sociedad dar a estos productos el valor que se merecen y que aprendamos a reconocer cuánto cuesta hacer las cosas con las manos de forma artesanal, el tiempo que lleva, la espera que necesita y la destreza que requiere.
Enrique F.
Deja una respuesta